Cuando nos quedamos en Chiang Rai fue con la intención de utilizarla como base para conocer sus alrededores. Queríamos intentar salir un poco de las rutas más turísticas, aunque hay lugares que no puedes dejar de visitar.
El norte de Tailandia lo conocimos en el años 2007 cuando en nuestro viaje por este país nos trajo hasta la fascinante Chiang Mai. Visitamos los pueblos de las comunidades de las “Mujeres Jirafa”, Mae Hong Son e hicimos algún que otro treking por la selva, rutas en elefante y rafting en balsa de bambú. Pero esta vez queríamos hacer algo diferente.
Una de las cosas que teníamos claro en visitar era el “Templo Blanco” o » Wat Rong Khun«, es un lugar impresionantemente bello, de un blanco deslumbrante, brillante, sin duda un lugar curioso ya que una de las cosas más llamativas de este lugar es su interior, el cual no se puede fotografiar, pero que no deja a nadie indiferente, ya que entre las imágenes de budas y monjes, el autor de estos dibujos colocó a un elenco de famosos mundiales, entre los que podemos divisar a Michael Jackson, Doraimon, los protagonistas de Star Wars con sus naves estelares, etc.,etc., etc.
Un día bien temprano salimos de nuestro guesthouse y nos dirigimos hasta la estación de buses, no teníamos ningún destino establecido, solo era cuestión de pillar un bus e ir a conocer algún pueblo cercano y que el trayecto no durase más de 2 horas. Por horarios del bus escogimos Chiang Saen, y que gran elección!!que gran descubrimiento!! Un pueblo ribereño del Mekong y fronterizo con Laos, a una hora y media de camino desde Chiang Rai, un lugar maravilloso, muy bonito.
Chiang Saen nos sorprendió con una ciudad histórica cuan del antiguo reino de Lanna, que más tarde se estableció en Chiang Mai. Hoy en día se encuentra en un proceso lento de rehabilitación quieren intentar hacer de ella una especie de ciudad histórica como la de Sukotai. Los wat y pedazos de las murallas de la ciudad antigua se encuentran desperdigados por la ciudad moderna, paseando por ella te puedes encontrar con las tumbas reales en el Wat Pa Sak o encontrarte con diferentes estupas en medio del jardín de una casa, la verdad que es algo bastante llamativo. También pudimos ver lazona del templo donde viven y estudian los monjes, charlar un rato con ellos, una experiencia inolvidable.
Deambulando por la ciudad nos topamos por casualidad y cerca del ayuntamiento con un orfanato donde un grupo de religiosas tienen alojadas a jóvenes niñas que por problemas familiares se deben de alojar allí. Cuando pasamos por delante de este centro, una de las monjas nos invitó a pasar, nos explicaron y enseñaron la labor que ellas hacían en ese lugar, nos invitaron a tomar un té y estuvimos dialogando con ellas un buen rato, la verdad que fue una preciosa experiencia. Nos preguntaron por nosotros, y les explicamos a ellas y las niñas que se sentaron alrededor de nosotros sobre nuestro #Asiapara3, lo que llevábamos recorrido y lo que nos faltaba por hacer.
Hay veces que cuando sales de las rutas establecidas y te dejas llevar, llegas a encontrarte con auténticos paraísos, lugares maravillosos de los cuales no esperabas más que las sonrisas de sus habitantes.
NOTA.- En Chiang Rai nos alojamos en el Baanbaramee Guesthouse, un lugar maravilloso, muy céntrico y con unos precios muy buenos. Tiene una habitaciones preciosas, grandes y muy limpias y modernas, el desayuno está incluido, uno de los mejores lugares para alojarse en esta ciudad. El precio para los tres en la habitación 998 la más cerca de la recepción (mejor wiffi) con baño y desayuno era de 500 bath en agosto de 2013.
Para ir hasta el Templo Blanco, en la estación de buses del centro de la ciudad, se coge el bus que sale del andén 8, en agosto del 2013 costaba 20 bath por persona.
Para ir hasta Chiang Saen, desde la estación de buses hay dos, uno en el andén 5 y otro en el 6, pero hay que preguntar porque hay veces que cambian de andenes. De todas formas en la misma estación hay una cuadro con los buses, sus trayectos y el precio de estos.