Cualquier excusa es buena para darse una escapada. Si no disponemos de demasiados días de vacaciones, una escapada a un país cercano es lo ideal. Escapadas rurales, playeras, deportivas, gastronómicas o enológicas. Solos, en pareja, con amigos o en familia, las hay para todos los gustos. Todas valen, pero si hablamos de una escapada enológica, mejor dejamos a los peques en casa. Hoy viajamos de nuevo a Portugal para conocer de cerca sus bodegas y a sus famosos vinos de Oporto.
La gastronomía y la enología están de moda en Portugal. Países como Francia, Portugal, Italia y la propia España, entre otros, tienen mucho que decir al respecto. La dieta mediterránea es admirada y valorada en cualquier pare del mundo por su variedad y calidad.
Nuestros vecinos portugueses la conocen y la aplican bien. Costumbres muy arraigadas en Portugal son las reuniones alrededor de una mesa llena de comida con amigos o familiares. Algo que sin duda nos hace muy parecidos a ellos. Portugal, es un ejemplo de país muy visitado por españoles, por cercanía, por su rica gastronomía y sobre todo, por sus vinos de Oporto. Una escapada a esta ciudad ribereña, no estaría completa sin la visita a sus bodegas. Nos guste más o menos el vino, lo que está claro es que la enología está de moda.
El Alto Douro Vinhateiro y los vinos de Oporto
Portugal en general y la zona del alto Douro Vinhateiro en particular, gozan de una afamada reputación por la elaboración de sus vinos. Los vinos de Oporto son conocidos a nivel mundial desde antes del siglo XVIII.
Si visitas la bonita ciudad de Oporto, no puedes dejar escapar la oportunidad de venir hasta aquí. El valle del Duero, zona vinícola con más de 2000 años de historia y cuna de los reputados vinos de Oporto. Un hermoso paisaje vinícola de más de 26000 hectáreas. Una maravilla que no pasó desapercibida por la Unesco y la declaró paisaje cultural Patrimonio de la Humanidad. Aquí nacen los vinos de Oporto, excelentes vinos generosos y de mesa con denominación de origen. Blancos, tintos y también rosados. De intensidad aromática y cargados de dulzor. Casan perfectamente con quesos, pero también con el chocolate. Casan perfectamente con todo lo que uno quiera.
Un lugar inolvidable al que puedes llegar en tren, en coche o navegando por canales fluviales. Hospedarte y saborear la gastronomía del lugar en las numerosas “quintas” y hoteles rurales rodeados de viñedos. Descubrir sus maravillas vinos mediante visitas y catas en sus numerosas y famosas bodegas. Realizar idílicos paseos entre preciosas aldeas rurales. Disfrutar de algunos de los atardeceres más aromatizados del mundo gracias a los vinos de Oporto y que jamás olvidarás.
Si os gusta la cultura del vino, la buena mesa y la belleza paisajística, aquí tenéis otra excelente excusa para daros una escapada a Oporto.