Estamos en época de vacaciones estivales y toca ponerse las pilas para organizarlas. No importa si disponemos de más o menos dias, como tampoco, si nuestro presupuesto es mayor o menor. Si este año no disponemos ni de muchos días, ni tampoco de demasiados recursos, os invito, por ejemplo, a un viaje a Madrid en verano.
Después de ver todo lo que se cuece por el mundo, de lo que se trata es de disfrutar. Hay tantas opciones como ganas de viajar. En avión, en coche, en furgoneta, en bus y por supuesto en tren.
Hoy, en este artículo, os voy a proponer una de las formas de viajar que más me gustan de entre las mencionadas anteriormente. La que a lo largo de mi vida viajera, en familia y en solitario he utilizado en incontables ocasiones y es el tren.
En el caso de España, al igual que existen compañías aéreas low cost, también las hay para viajar en tren. Con salidas y llegadas desde y hasta los destinos mas variados del país, como viajar en tren de Barcelona a Madrid.
Os preguntaréis que ventajas tiene para mi haber usado este medio de transporte en tantísimas ocasiones y a continuación os las cuento.
Ante todo la comodidad, para mi es uno de los motivos principales. Sobre todo, si optamos por viajar con nuestros niños, personas con problemas de movilidad como nuestros mayores, e incluso con nuestras mascotas. Tanto si decidimos viajar de día o de noche.
Los viajes en este medio de transporte son más tranquilos. Los asientos suelen ser mas anchos que en un avión y la comodidad de poder estirar las piernas a nuestro antojo.
Mas ventajas…
En los trenes, no te ponen límites a la hora de llevar equipaje en general y todo tipo de líquidos en particular. Las estaciones suelen estar en el centro de las ciudades. Este detalle te proporciona el llegar a ellas con más facilidad y porque no decirlo, de una manera más económica. Por ejemplo, en un viaje en tren de Madrid a Barcelona, te ahorras el meterte en su aeropuerto, poco menos que bastante caótico a veces. Ni que decir tiene de las largas colas para embarcar que nos vamos a ahorrar.
Es por ello que os invito, a que si no lo habéis hecho nunca, lo probéis y que empecéis, como os he propuesto al principio. Con un viaje a Madrid en verano y en tren.
Así empecé yo, dije adiós a las interminables colas en carreteras y autopistas, donde lo único que conseguía era ponerme nerviosa.
Así fue como me di cuenta, que los viajes en tren, además de proporcionarme más libertad de movimientos, me hacen disfrutar del mundo con más calma.
Desde aquella mi primera experiencia, aún siendo una adolescente. Con la mochila cargada de ilusiones por descubrir el mundo y el bolsillo más vacío que lleno, además de España, países como Alemania, Argentina, Grecia, Turquía, Tailandia, Vietnam, Corea y China , han sido algunos de mis destinos elegidos para recorrerlos en este medio de transporte.
Y sabéis una cosa?… no pienso parar.