Después de nuestra primera gran aventura viajera en familia por Grecia, nos dimos cuenta que no era tan difícil y sin problema habíamos conseguido rular por el país en compañía de nuestro peque y de las mochilas cargadas de pañales.
El país heleno además de cubrir nuestras expectativas, nos regaló la amistad de una pareja de argentinos que hoy en día conservamos, Paula y Hernán. Como no podía ser de otra manera, los chicos orgullosos de su maravilloso país nos convencieron para ir a visitarles a la Argentina.
A nosotros que no hace falta demasiado esfuerzo para animarnos, seis meses después de regresar de Grecia, decidimos volver a preparar las mochis y lanzarnos a nuestra primera aventura americana, esta vez la cosa iba en serio, era un gran reto para unos novatos como nosotros con un bebé de 18 meses llevar a cabo un viaje tan largo.
Mucho habíamos leído y oído sobre Buenos Aires, sin duda una ciudad que no deja indiferente a nadie. Con toda la ilusión del mundo en mayo de 2003 nos fuimos los 3 a conquistar las Américas.
En este viaje, el peque ya caminaba, eso supone que se ensuciaba un mogollón, pero no fue ningún problema, para eso están las lavanderías.
Después de un vuelo largo pero tranquilo, aterrizamos en la ciudad de Buenos Aires tempranito por la mañana. Allí nos esperaba nuestro amigo Hernán para llevarnos hasta su casa en el centro de la ciudad, concretamente en la calle Callao. Un edificio precioso donde el ascensor te dejaba directamente dentro de la casa y por si fuera poco tenían a Don Enrique, el portero que siempre estaba dispuesto a ayudarte.
Que grandes amigos son estos chicos!!!, aquí en su ciudad nos hicieron de guías turísticos y nos abrieron no solo las puertas de su casa, sino también el corazón de toda su familia.
La bella ciudad de Buenos Aires que mucho nos recordaba a nuestra querida Barcelona, está situada en la costa del Río de la Plata, tan ancho que muchos viajeros lo confundimos con el mar, tiene un clima templado y muchos días de sol por año. El paisaje natural de la región, verde y húmedo, puede gozarse en los parques, en las afueras o en la gigantesca Reserva Ecológica que se encuentra a sólo cinco minutos del Centro de la ciudad.
La ciudad tiene 48 barrios para recorrer. En cada uno hay bares, plazas, canchas de fútbol y otros deportes, templos, milongas y teatros. Buenos Aires está considerada la cuarta en importancia en el teatro mundial y tiene más salas que Nueva York. Los museos porteños, tradicionales o modernos, son famosos. El tango la música y la danza, puede conocerse en la tanguería más sofisticada o en la milonga más popular de un barrio.
El cine alternativo, músicos y diseñadores son el origen de encuentros y festivales internacionales. En Buenos Aires hay ferias y actividades culturales todo el año. Otra de las pasiones de esta ciudad sin duda es el fútbol, con el clásico nacional entre el Boca y el River.
Con más de 3000 restaurantes, comer aquí es una cuestión de elegir dónde y qué.
Desde lo típico, asado o pizza en los lugares llamados tenedores libres, hasta la comida de alguna de las muchas comunidades que se instalaron en la ciudad durante siglos de inmigración. Sin dejar de comer las típicas «facturas» en el desayuno, dulcitos rellenos sobre todo de dulce de leche, que dicho sea de paso, están buenísimas!!. No os lo vais a creer pero ha sido del único país donde hemos vuelto con muchos kilos de más, en un mes vimos como nuestros cuerpos sucumbían a la fabulosa gastronomía porteña!!!!
Para moverse por la ciudad, existe un sistema de transporte con múltiples opciones: seis líneas de subtes (así se abrevia el nombre de los subterráneos), más de cien líneas de colectivos (así se llama en Buenos Aires a los ómnibus o autobuses) y ferrocarriles (o trenes) interurbanos. Los taxis y remises son un medio de transporte muy común, ya que son seguros y comparativamente más económicos que en otras ciudades.
En nuestra visita a la ciudad, destacaríamos los siguientes puntos que sin duda nos parecieron de los más interesantes.
Barrio de San Telmo, uno de los barrios más antiguos y típicamente porteños.
Tango, bares y antigüedades. Es parte del caso histórico de Buenos Aires y se encuentra muy cerca de la Plaza de Mayo. Es famoso por la feria de antigüedades (mercado de pulgas) que se lleva a cabo todos los domingos en la Plaza Dorrego. La vida bohemia y el tango hacen parte de la atmósfera del barrio, todavía conserva la esencia de la antigua Buenos Aires. En San Telmo es posible encontrar un bar donde escuchar tango y beber un café, vino o cerveza con los vecinos del barrio. Es el elegido por muchos artistas y artesanos para vivir y realizar su obra.
Plaza de Mayo, es el centro histórico, político y social de Buenos Aires. La Plaza de Mayo es el lugar donde los ciudadanos expresan sus estados de ánimos, desde celebraciones a protestas y reclamos sociales. El nombre oficial del barrio es Montserrat. En ella se encuentra la Casa Rosada o casa del Gobierno y el Edificio del Cabildo. En ella, a parte de darle de comer a las palomas, nos dimos cuenta del horroroso color rosa de la fachada de la casa donde tantas veces en el cine habíamos visto asomarse desde el balcón a la enigmática Evita Perón. Impresionante es también escuchar los lamentos de las madres que cubriendo sus cabezas con pañuelos blancos no faltan ni un solo día a la cita.
El barrio de La Boca, es el barrio más visitado por los turistas y al mismo tiempo es uno de los más pobres de la Ciudad. Sus habitantes tienen un marcado sentido de pertenencia con el barrio y suelen participar de diferentes actividades comunitarias. Nació como un puerto natural en el Riachuelo. Desde 1870, La Boca comenzó a recibir una gran cantidad de inmigrantes, en su mayoría italianos (genoveses). Los inmigrantes construyeron sus casas con chapas de zinc y las pintaron con las pinturas que sobraban en los talleres del puerto, por tal motivo las casas son muy coloridas, en la actualidad esa costumbre se mantiene en algunos sectores del barrio. Las casas fueron llamadas “conventillos”, eran viviendas colectivas donde muchas familias vivían compartiendo espacios comunes.
Debido a las inundaciones frecuentes y a los incendios que solían suceder en los “conventillos”, un grupo de vecinos en 1884 crearon el primer cuerpo de Bomberos Voluntarios de Sudamérica.
Por la noche el barrio permanece muy solitario por lo que se recomienda tener precaución y cuidado, lo mismo los días que hay partidos en el Estadio de Boca.
Nosotros lo recorrimos de día y acompañados de nuestro amigo Hernán, mientras el «gordito» de Álvaro y la «gordita» de Paula (embarazadísima de Nikolaki) descansaban en casa.
La Calle llamada, El Caminito, es la calle más famosa del barrio, el sitio donde algunos pintores venden sus obras a los visitantes. La calle Caminito nació en 1950 cuando un grupo de vecinos, en el cual estaba el reconocido pintor Quinquela Martín, decidieron recuperar un terreno abandonado por donde pasaba el tren. Limpiaron el lugar y después de algunos arreglos lo bautizaron con el nombre de Caminito, en homenaje al famoso tango compuesto en 1926 por Juan de Dios Filiberto y Gabino Coria Peñaloza.
No es posible hablar del barrio de la Boca sin hablar del fútbol. El Club de Fútbol Boca Juniors es quizás el equipo de fútbol con más simpatizantes de toda Argentina. La sede del club y su estadio se encuentra en el corazón del barrio de La Boca. El estadio es conocido cariñosamente como “La Bombonera” ya que al momento de su inauguración, en el año 1940, parecía una caja de unos reconocidos bombones de chocolate.
Como grandes aficionados que somos a este deporte, no nos podíamos perder esta visita. Estábamos junto al templo de ese gran jugador que tantas veces nos hacía disfrutar con su juego, Diego Armando Maradona.
Recorrer el barrio de Recoleta y su famoso cementerio, céntrico y elegante, El Cementerio de la Recoleta es un verdadero museo y fue declarado Patrimonio Histórico de la Ciudad, la entrada es gratuita, o por lo menos lo era cuando nosotros estuvimos. En su interior se puede apreciar importantes obras de arte realizadas por destacados escultores argentinos y extranjeros. En el Cementerio se encuentran los restos mortales de importantes personalidades de la política, de la cultura, el arte y la ciencia argentina. «Evita Perón» es uno de sus ilustres huéspedes.
Un agradable paseo por Puerto Madero, en él se ubican las oficinas de importantes empresas y cotizadas residencias. También hay reconocidos restaurantes, una universidad, lujosos hoteles, museos y el casino flotante.
Puerto Madero es un barrio que rinde homenaje a “las mujeres”. Por tal motivo sus calles llevan nombres de mujeres de las ciencias, las artes, la política y la cultura. También se encuentra el Puente de la Mujer, exclusivamente peatonal y obra del famoso arquitecto español Santiago Calatrava, es giratorio para permitir el paso de embarcaciones. Varias torres hacen referencia al sexo femenino. Tiene toda una zona peatonal, alrededor de los diferentes diques. Una zona muy bonita para caminar y disfrutar del río y el aire libre.
La Costanera Sur junto a Puerto Madero, durante muchos años el lugar era el balneario favorito de los porteños. En la actualidad es un importante lugar de esparcimiento, donde los fines de semana muchas personas concurren a realizar actividades deportivas, asistir a espectáculos callejeros o a la feria. Desde sus comienzos Puerto Madero se convirtió en un importante polo gastronómico que concentra una gran cantidad de restaurantes. En el se ubican además numerosos carritos donde degustar el famoso «choripan»
Respirar en Los Bosques de Palermo, es otra buena opción para acercarte sobre todo si visitas la ciudad con los niños, están compuestos por diferentes parques y aéreas públicas como, El Planetario Galileo Galilei, El Zoológico, el Jardín Botánico, El Jardín Japonés, El Lago de Regatas, el Parque Tres de Febrero con el Rosedal y el Hipódromo Argentino de Palermo. En los bosques funcionan unos carruajes tirados a caballos que son el vehículo típico para realizar paseos. A los carruajes se los conocen como “Mateos”.
El Rosedal es uno de los parques más bonitos de Palermo. Cuenta con un lago donde se puede alquilar botes para realizar paseos. Además por medio de un hermoso puente se accede al rosedal que cuenta con más de 18 mil rosales.
Excursión al Municipio de Tigre, Se encuentra a 33 km de la ciudad de Buenos Aires. La ciudad de El Tigre, está ubicada a orillas del Delta del Río Paraná. Dispone de dos estaciones de ferrocarril, aunque también se puede llegar en bus, nosotros optamos por la primera opción, nos encanta viajar en tren y siempre que tenemos ocasión lo hacemos.
Para este día, nos quisimos regalar un paseo por la zona disfrutando de un día al aire libre y sin duda mereció la pena, bajo un cielo azul precioso disfrutamos del Delta del Paraná que es el quinto mayor del mundo y el único que desemboca en un curso de agua dulce.
El Delta está compuesto por numerosos ríos, arroyos y canales que forman muchas islas. La Ciudad tiene una estación fluvial, donde se pueden tomar lanchas y catamaranes para realizar largos y bonitos paseos. En las islas hay diferentes propuestas para pasar el día, hacer picnic, asados o comer en restaurantes.
El paseo en barco es muy aconsejable, disfrutas de las vistas sobre las fabulosas casas con espectaculares jardines que rodean el río. Ese día estuvimos acompañados por el inseparable amigo de Álvaro, un bicho verde llamado «Piti».
Y como dirían Joaquín Sabina Y Fito Paez…
«En Buenos Aires brilla el sol y un par de pibes,
en la esquina, inventan una solución.
En Buenos Aires todo vuela, la alegría,
la anarquía, la bondad, la desesperación.
Y Buenos Aires es un bicho que camina,
ensortijado entre los sueños y la confusión.
En Buenos Aires descubrí que el día
hace la guerra, la noche el amor.
En Buenos Aires leo, fumo, toco el piano
y me emborracho solo en una habitación.
En Buenos Aires casi todo ya ha pasado
de generación en degeneración…«