Este año, ha sido un tanto extraño a lo que a nuestros planes viajeros se refiere. Empezamos el año teniendo claro que en vacaciones regresaríamos a Europa con la furgo. Un viaje de 90 días que nos llevaría a descubrir países tan interesantes como Rumania y Polonia entre otros. Con la guía ya comprada y las primeras rutas ya trazadas todo cambió, motivos laborales fueron los causantes.
De un día para otro nuestro objetivo se había desmoronado, los 90 días con los que habíamos soñado se desvanecían como el humo. Obviamente ya no salía tan a cuenta embarcar la furgoneta en el Ferry, ya no solo por el gasto que supone, sino también, por el tiempo que invertimos los Canarios en llegar hasta Europa.
El plan “B” se pone en marcha
Todo viajero que se precie tiene que llevar siempre un plan “B en la mochila. De 90 días pasamos a 50, si, ya se que muchos pensáis que cincuenta días son una pasada, pero cuando uno se hace a la idea de casi el doble, la forma cambia. El final ya lo conocéis, Brunei, Borneo, Java, islas Gili y Bali.
A nuestro regreso del IndoBorneopara3, que así fue como bautizamos esta aventura, nos ha costado un poco asimilar todo lo que nos ocurrió en este gran viaje. Al final es verdad, 50 días dan para mucho. Recorrer lugares tan enigmáticos y menos conocidos como el Sultanato de Brunei y el estado malayo de Sabah en Borneo, o las islas de Java, Bali, Lombok o Gili en Indonesia dan para muchísimas anécdotas y sensaciones viajeras, tanto positivas como negativas.
Cuando empezamos a plantearnos este nuevo reto viajero, una cosa teníamos clara, si el destino nos había hecho cambiar de planes por algo sería, así que éste, seguro iba a ser, porque ya empezó así, un viaje diferente a todos los demás.
En este viaje queríamos cambiar esa alocada forma de movernos de aquí para allá intentando ver el máximo de cosas en el día a día, para intentar detenernos en esos detalles que debido al afán de conocer más y más, solemos pasar de puntillas, en este viaje queríamos descubrir a las personas. Esta claro que hay lugares históricos y de gran interés cultural que no puedes dejar pasar por alto, pero éstos en este viaje, eran los menos. Así que decidimos no llevar ninguna ruta trazada, ni planificar nada con antelación, la inspiración diaria era la que nos iba a guiar.
En esta ocasión, no existiría en nuestro trazado ni reservas cerradas de alojamientos, ni billetes de tren o bus programados minuciosamente con antelación.
Lo único que llevamos contratado era el vuelo de Sabah a Yakarta y el de regreso a España desde Bali, esas dos fechas eran las únicas que nos ataban un poco el viaje ya que por suerte o por desgracia era lo que teníamos cerrado desde antes de iniciar el viaje.
Nuevas sensaciones viajeras es familia
Os pasamos a describir las sensaciones que vivimos por los lugares visitados así os podréis hacer una mejor idea de lo que sentimos en cada uno.
SULTANATO DE BRUNEI
De este pequeño estado localizado en la isla de Borneo, solo conocíamos la opulencia que desde las revistas del corazón y la prensa amarilla occidental nos muestran del Sultán y su familia. En cambio para nosotros la realidad fue muy diferente, descubrimos un pequeño país habitado por personas maravillosas que al ver a un turista, escasos aquí, se te acercan y te preguntan para conocer algo más de ti. Un pequeño país bien cuidado, limpio, con buenas infraestructuras y con hermosos paisajes que no te dejarán indiferente, pero sobre todo, nos quedamos con la amabilidad de sus habitantes.
ESTADO MALAYO DE SABAH
Que ganas teníamos de visitarlo!, durante nuestra estancia en Sabah, estuvimos en dos ciudades y algunos de sus pueblos. Como os hemos contado anteriormente, íbamos con la intención de visitar lo que cada día el cuerpo nos pidiese y un poco más y nos quedamos a vivir aquí. La gente es tan simpática y el lugar es tan tranquilo y seguro que hace que te sientas bien y no desees irte nunca. Siempre tienen una sonrisa en la cara, intentan ayudarte en todo lo que pueden.
Tienen buenas infraestructuras para moverte de un lugar a otro, aunque la nota negativa, es la suciedad que predomina en muchas zonas de pueblos y ciudades. Parques, jardines y algunas calles llenos de basura, no cuidan demasiado su entorno, quizás sea debido a la falta de concienciación o recursos hacia el reciclaje que aquí en Asia es bastante común.
JAVA
Grande, muy grande, muy habitada, demasiado habitada diría yo, no en vano, está considerada la isla más poblada del mundo, más de 120 millones de personas lo dicen todo. Ciudades grandes, mal cuidadas y mal distribuidas, salvo Yogyakarta. Muchísimo tráfico por cualquier pueblo o ciudad, mal estado de las carreteras y por supuesto mucha polución. Este es el aspecto negativo que nos llevamos de ella, en cambio, a las afueras de las ciudades todo cambia del negro de la polución al verde de paisajes maravillosos repletos de lugares tan espectaculares como los volcanes Tangkuban Perahu, Bromo o Ijen, o maravillas arqueológicas como los templos de Borobudur y Prambaran.
Menos mal que todo lo negativo pasa desapercibido cuando te encuentras con sus habitantes, personas te dan todo lo que tienen para hacer que te sientas como en tu propia casa.
BALI
Hermosa, más que hermosa, así nos pareció Bali, aunque es cierto que al principio no estábamos muy convencidos en visitarla al tratarse de un lugar tan turístico. A pesar de ello, esta isla nos enamoró desde el primer momento. Terrazas de arroz infinitas, esa cantidad de templos hinduistas salpicados por toda la isla y esos pequeños pueblos cargados de gentes maravillosas. Durante nuestra estancia coincidimos con varias procesiones religiosas que le dio a nuestra visita un sentido más místico, más espiritual, haciendo que nos enamorásemos más de ella.
A pesar de lo que muchos viajeros opinan de ella, a nosotros nos fascinó la ciudad de Ubud, tan pequeña pero tan grande a la vez, mucho turismo si, pero sin esa sensación de agobio. Una ciudad bien cuidada y limpia, con sus pequeños templos que se entremezclan con las casas de sus habitantes y los alojamientos turísticos.
Lo peor de la isla el tráfico, es sencillamente horrible, esa manera de conducir no les lleva más que al caos y por supuesto a los accidentes, aún así tuvimos la osadía de alquilarnos un coche para recorrerla. Otro aspecto bastante desagradable con el que te topas en Bali es el trato que tienen hacia el turista algunos de los trabajadores y empresas, sobre todo relacionadas con el transporte por carretera, que te abordan en las estaciones de bus y te tratan como si fuésemos borregos y siempre con la intención de timarte.
LOMBOK
Para ser sinceros, os diremos que esta isla la recorrimos poco, es nuestra asignatura pendiente, pasamos solo un par de días en ella pero como en toda Indonesia, nos encontramos con gente maravillosa, simpática y alegre y además tiene unos paisajes preciosos. No podemos hablar de aspectos negativos porque no nos dio tiempo a valorarlos, quizás en nuestra próxima visita lo averiguaremos.
GILI AIR
Que podemos decir de un lugar que fuimos con la intención de pasar tres noches y nos quedamos once, que no nos quedamos más tiempo porque teníamos que regresar a casa. Una isla maravillosa, turística pero nada agobiante, donde en cualquier momento del día ves más lugareños que visitantes. Un lugar que podríamos calificar de paraíso, con gentes maravillosas que cada vez que te cruzas por la isla con ellas te saludan. Playas de aguas turquesa y arena coralina, una isla salpicada por las casas de los lugareños con sus campos de labranza y el ganado pastando. Una isla donde las gallinas andan sueltas por las calles, donde no existe tráfico, ni polución, ni vehículos a motor, donde la gente se mueve a pie, en bici o en carros tirados por burros, donde la gastronomía es cuidada, con productos que ofrece la tierra y el mar, pero a la vez si quieres encuentras comida occidental, donde no hay mucha marcha pero si hay ambiente en determinados lugares. Una isla que puedes recorrerla dando un hermoso paseo por su playa en unos 90 minutos, donde los días pasan tranquilos terminando en uno de los mejores atardeceres del mundo donde todos los días la gente se reúne en las playas para disfrutarlo. Un lugar ideal para visitarlo en familia que nos marcó y que no nos importaría habernos quedado muchísimo más tiempo. De esta isla poco negativo podemos decir.
Como veis amigos, siempre suele pasar que nuestras sensaciones al regreso de los viajes suelen ser mas positivas que negativas y en este viaje en el que mas contacto con los lugareños hemos tenido prevalecen muy por encima las buenas sensaciones.
Lugares ideales para visitarlos por su buena gastronomía, su amplia oferta en alojamientos, pero sobre todo, por las personas que habitan en ellos.